MILHOJAS DE PATATA Y COSTILLAS ASADAS CON CHIMICHURRI
Para celebrar cualquier día de fiesta nos damos este capricho muy sencillito: una torre de Pisa comestible con sabor a clásico argentino. Este milhojas es súper fácil de hacer, se monta en un plis plas y, por si fuera poco, está que se te saltan las lágrimas. Te animas a crear esta obra de arquitectura sobre tu plato?? Che, tenés que probarlo… está tremendo!!
INGREDIENTES:
(4 personas)
1 costillar de cerdo
Patatas
PARA EL CHIMICHURRI:
½ manojo perejil fresco bien picado
2 cs. orégano fresco bien picado
4 dientes de ajo machacados
1 aji rojo o chile rojo pequeño (sin semillas) muy picado
2 cs. vinagre de vino o jerez
½ limón exprimido
125 ml. AOVE
Sal y pimienta negra (al gusto)
ELABORACIÓN:
Precalienta el horno a 180º (calor arriba/abajo).
Pela y corta las patatas en láminas finas, coloca sobre papel sulfurizado en una bandeja apta horno, sálalas y echa un poquito de AOVE por encima, hornea durante 40 mins.
Las costillas las hice en barbacoa pero está la opción horno que es tremenda también.
Precalienta el horno a 120º (arriba/abajo), introduce la carne en una bolsa de asar (en grandes superficies las encontrarás), cierra y hornea durante 4 horas.
Pasado este tiempo, saca las costillas, colócalas sobre la bandeja del horno y hornea en función grill a 220º diez mins. Se quedarán unas costillas crujientes por fuera y súper jugosas por dentro.
Quita los huesos (se desprenden fácilmente) y pica la costilla en trocitos.
Haz el chimichurri con los ingredientes señalados arriba y mezcla con las costillas… wait!
Para el emplatado:
Ve montando “pisos”.
Coloca, de forma alternativa, dos láminas de patata asada e intercala con la costilla impregnada de chimichurri… le puedes dar la altura que prefieras.
Ya tienes lista esta estructura comestible que va a encantar a tus invitados… del sabor ni hablamos, mejor que lo pruebes!!!